viernes, 25 de mayo de 2007

Ilegalidades de Bush en el caso Posada Carriles

Con la liberación del terrorista internacional Luis Posada Carriles, la Casa Blanca puede ser calificada, más allá de las agresiones a Afganistán e Iraq, en contumaz violadora de disposiciones legales norteamericanas y de varias leyes, resoluciones y convenios internacionales sobre esta materia.

Comencemos por lo interno. En primer lugar, la víctima es la tan publicitada y recurrida Ley Patriota, una de las principales medidas adoptadas por Washington tras los atentados del 11.9. y cuyo contenido extremo llevó a Bush a proclamar que " quien proteja a un terrorista, quien alimente a un terrorista, es tan terrorista como él".
En el plano internacional, EE.UU. se ha situado a la cabeza de quienes desconocen olímpicamente las normas que garantizan la convivencia organizada y pacífica de las naciones del orbe, y valga el "mérito" no solo por los torturados de Abu Grahib y Guantánamo y los secuestrados en cárceles clandestinas regadas por Europa.

Esa condición es merecida, entre otros incumplimientos, como veremos, por "ignorar" el Convenio sobre extradición suscrito con Venezuela en 1922, en virtud del cual la Unión está obligada a enviar allí al asesino para ser juzgado por la muerte de las 73 personas a bordo del avión cubano, siniestrado por Posada y sus mercenarios, el seis de octubre de 1976, frente a las costas de Barbados.

Pero también Bush ha convertido en papel desechable el Convenio de Montreal para la Represión de Actos Ilícitos contra la Seguridad de la Aviación Civil, aprobado por la ONU en 1971 y en vigor desde enero de 1973.

Hay más. El gobierno estadounidense olvidó sus obligaciones con el Convenio Internacional para la Represión de los Atentados Terroristas cometidos con Bombas, discutido detenidamente y aprobado de manera unánime en la Asamblea General de Naciones Unidas, y puesto en vigor en 2001 apenas cuatro meses antes del derribo de las Torres Gemelas.

¿Y qué decir de la Resolución 1371 del Consejo de Seguridad del máximo organismo internacional, aprobada a instancias de la Casa Blanca, solo 17 días después de que el World Trade Center fuera derribado con sus casi tres mil víctimas?

Todos los Convenios y Resoluciones citados establecen las más severas condenas al terrorismo, obligan a las naciones a la adopción de medidas internas y de cooperación internacional para combatir el flagelo y tienen como figura jurídica común la extradición de los autores de tales episodios, para ser juzgados en un tercer país que así lo solicite.

De ese modo el país más poderoso del planeta, con un gigantesco aparato de inteligencia y un presupuesto multimillonario para responder a su autoproclamado liderazgo en la batalla mundial contra el terrorismo, se burla de los deseos y vocación pacifistas de la humanidad.

Después de eso, ¿podrá alguien creer en la voluntad y sinceridad expresadas en las constantes diatribas de Bush, y de la veracidad de sus listas de naciones terroristas entre las que, para colmo, Estados Unidos no se incluye?

Por: Ángel Rodríguez Álvarez

Sigue desfachatez en EE.UU. con el caso Posada Carriles

Es tan buena la fe del gobierno de Bush que enjuició al criminal Luis Posada Carriles sólo por fraude migratorio, pero nunca por sus crímenes ni aceptó su extradición a Venezuela, pese a un acuerdo bilateral con Caracas, denuncia hoy el periódico Granma.

En comentario titulado: Washington tiene buena fe... con el terrorista, el diario cita un despacho de la agencia Reuters que refiere declaraciones de Thomas Shannon, subsecretario norteamericano de Estado para asuntos del hemisferio occidental, quien dijo el jueves que su país está actuando con "buena fe" frente al caso de Luis Posada Carriles.
Posada, ex agente de la CIA, es autor confeso del derribo en 1976 de un avión civil cubano que ocasionó la muerte de 73 personas. También entrenó a mercenarios centroamericanos a quienes entregó bombas que estos hicieron estallar en hoteles de La Habana y provocaron la muerte del italiano Fabio di Celmo y heridas a otros cubanos.

Sin embargo, Shannon informó que su Departamento de Justicia todavía sigue con investigaciones acerca del señor Posada Carriles, y afirmó: "Es un caso que está en proceso, nosotros estamos actuando en buena fe, reconociendo nuestras leyes y nuestras obligaciones a nuestros colegas en la OEA (Organización de Estados Americanos) e individualmente a sus gobiernos".

Pero el propio cable de Reuters recoge la opinión de que en Washington hay no pocos que critican la actuación del gobierno en este caso.

Por ejemplo, Peter Hakim, presidente del centro de investigación Diálogo Interamericano opinó que es un gran error de Estados Unidos no encontrar una solución para una persona que obviamente está identificada por mucha gente, incluso el FBI, en actos de terrorismo y a la cual puso en libertad.

Por: Agencia Cubana de Noticias

miércoles, 23 de mayo de 2007

Posada Carriles, acusado en juicio público en Cuba

La juventud cubana realizó, el 14 de Mayo del 2007, un juicio político de dos días contra el terrorista Luis Posada Carriles ante la negativa del gobierno de Estados Unidos de juzgarlo por crímenes de lesa humanidad.

Se trata del primer proceso de este tipo en la Isla contra Posada Carriles, quien fuera liberado por una jueza estadounidense, pese a la solicitud de extradición hecha por Venezuela. El nombre de Posada Carriles, sin embargo, afloró en más de una oportunidad en un juicio similar realizado años atrás en este país para demostrar el accionar terrorista contra la isla desde Estados Unidos.

Más de tres mil personas perdieron la vida en Cuba y otras dos mil resultaron mutiladas en hechos violentos organizados desde territorio norteamericano, a partir de 1959 hasta la fecha. De acuerdo con el líder de la Unión de Jóvenes Comunistas de Cuba (UJC), Julio Martínez, el objetivo del juicio político es demostrar ante el mundo que Posada Carriles es "uno de los peores terroristas del planeta". Martínez adelantó que en esta vista pública quedará evidenciada la complicidad del gobierno de George W. Bush con la mafia terrorista anticubana. Señaló que para este proceso la UJC cuenta con la colaboración de los ministerios del Interior y de Relaciones Exteriores, la Fiscalía General de la República y el Tribunal Supremo Popular, entre otras instituciones.

En el juicio los testigos presentaron pruebas sobre la culpabilidad del encartado en actos violentos contra Cuba. Posada Carriles es responsable de la voladura de un avión civil cubano en 1976 con 73 personas a bordo, y autor confeso de una cadena de atentados en La Habana, en 1997, con saldo de un turista italiano muerto, entre otros hechos contra el país. Además, es prófugo de la justicia venezolana, por haberse evadido de una cárcel de la nación suramericana en 1985, donde estaba recluido mientras era investigado por el sabotaje a la aeronave cubana en Barbados. Entre otros hechos, en noviembre de 2000, el presidente Fidel Castro denunció la presencia de Posada Carriles en Panamá junto a un comando que planeaba asesinar al estadista en el contexto de la Cumbre Iberoamericana en la nación istmeña. Cuba reclama justicia en este caso, luego que éste fuera exonerado de la cárcel por la administración Bush, que ha ignorado el pedido de extradición de Venezuela para juzgarlo.

martes, 22 de mayo de 2007


La verdad sobre el Atentado al avión de Barbados


Los hechos
El sabotaje lo ejecutaron dos venezolanos -Freddy Lugo y Hernán Ricardo-, quienes abordaron el avión cubano de pasajeros en la capital de Trinidad y Tobago, el 6 de octubre de 1976. Ocultaron explosivo C-4 en una cámara que el Sr. Ricardo colocó en el baño trasero del avión. Ambos hombres desembarcaron en Barbados, y el avión condenado despegó y estalló poco después, en pleno vuelo, sobre las playas arenosas de Barbados. Murieron las 73 personas que iban a bordo, incluyendo una pasajera embarazada.
La policía de Barbados inmediatamente dirigió su investigación a Lugo y Ricardo y los arrestó pocas horas después del ataque. Al ser interrogados, ambos confesaron e implicaron a otros dos en el plan: Luis Posada Carriles y Orlando Bosch. Las autoridades venezolanas arrestaron a Posada y a Bosch en Caracas. Durante un registro en la casa y en el negocio de Posada Carriles, la policía encontró pruebas que corroboraban las confesiones de los dos hombres en Barbados.
El 25 de agosto de 1977, la jueza Delia Estava Moreno envió el caso de los cuatro a un tribunal militar bajo la acusación de traición. El tribunal militar los absolvió, dando pie al mito de la absolución. Pero esa no es la historia. Más tarde, el Tribunal Militar de Apelaciones decidió que el tribunal militar carecía de jurisdicción para juzgar a los cuatro hombres y anuló el proceso anterior. El juez decidió que “los procesados en el caso del vuelo de Cubana derribado cerca de Barbados el 6 de octubre de 1976 son civiles y los delitos que se les imputan están previstos en el código penal (y no en el militar)”.
“La jurisdicción militar”, dijo el Tribunal, “es aplicable a los militares por infracciones militares. Los civiles y los delitos comunes no están sujetos a las disposiciones del Código de Justicia Militar… El Tribunal Militar considera necesario aclarar que no posee la capacidad procesal subjetiva para realizar el actual proceso judicial”.
El significado del fallo del tribunal
¿Qué significa que el Tribunal “no posee la capacidad procesal” para juzgar el caso? Que el fallo del tribunal inferior es anulado, y que todo los antecedentes del caso son nulos, muy parecido al efecto legal que una anulación tiene en un intento de unión conyugal. Por ejemplo, un divorcio disuelve un matrimonio, mientras una anulación declara legalmente que el matrimonio nunca tuvo lugar.
Los cuatro fueron acusados entonces de homicidio culposo y traición ante un tribunal civil: el Décimo Tribunal Superior del distrito judicial del estado de Miranda. El proceso comenzó como si fuera por primera vez.
La evidencia registrada y la prensa venezolana
La evidencia de ese juicio es voluminosa y está corroborada ahora por documentos recientemente desclasificados por la CIA y el FBI y publicados por los Archivos de Seguridad Nacional de la Universidad George Washington. Posada Carriles admitió apenas unos días antes del derribo del avión que “Vamos a atacar a un avión cubano, y Orlando (Bosch) tiene todos los detalles”. Los registros del tribunal venezolano contienen declaraciones juradas que confirman que la persona que colocó la bomba en el baño trasero del avión, Hernán Ricardo, admitió haber llamado a Luis Posada Carriles por larga distancia desde Barbados para informarle que la misión de hacer estallar el avión había sido realizada, y se refirió a los pasajeros asesinados como “perros”.
Según un documento del FBI con fecha 21 de octubre de 1976, la organización responsable de la voladura del avión fue CORU (Comando de Organizaciones Revolucionarias Unidas), una organización terrorista fundada unas semanas antes para realizar ataques terroristas en todo el Hemisferio Occidental. Uno de los miembros de CORU, Secundino Carrera, declaró que la “voladura y las muertes resultantes estaban totalmente justificadas porque CORU estaba en guerra con el régimen de Fidel Castro”.


La fuga de Posada de la prisión
La víspera del pronunciamiento de su sentencia el 8 de agosto de 1985, se fugó del penal de San Juan de los Morros, situado en el estado de Guárico, donde había sido confinado después de otros dos intentos de fuga. No se pronunció ningún veredicto contra Posada Carriles, porque según el Código Penal venezolano un procedimiento judicial no puede realizarse sin la presencia del acusado. El tribunal emitió una orden de arresto en su contra.
Sus cómplices, Freddy Lugo y Hernán Ricardo, fueron declarados culpables el 21 de julio de 1986 y condenados a 20 años. El juez redujo la pena hasta su límite menor, “debido a la circunstancia atenuante de que no poseían antecedentes penales”. Sin embargo, Orlando Bosch fue absuelto misteriosamente.


Posada en El Salvador
Después de huir de la prisión venezolana, Posada Carriles reapareció en El Salvador, bajo el alias de “Ramón Medina”, nombre que le concedió el gobierno salvadoreño. Según documentos del FBI publicados por los Archivos de Seguridad Nacional, se convirtió en “director de apoyo” de la ilegal operación de abastecimiento a los contras, realizada por la Casa Blanca de Reagan desde la base aérea de Ilopango en San Salvador. En una declaración de 31 páginas prestada a agentes del FBI en Tegucigalpa, Honduras, como parte de la investigación del fiscal independiente acerca del escándalo Irán-Contras, Posada detalló su participación en estas operaciones encubiertas, incluyendo el vuelo de misiones para reabastecer a soldados contras en el sur de Nicaragua.
Posada Carriles continuó su campaña de terror desde su guarida en la base aérea de Ilopango en San Salvador. En información publicada en The New York Times el 12 de julio de 1998, Posada admitió que él había organizado una serie de sabotajes con bombas que provocaron el asesinato de un turista italiano y heridas a varios otros. En 2004 fue condenado en Panamá por “poner en peligro la seguridad pública” en un complot para asesinar a Fidel Castro con el uso de poderosos explosivos C-4 en la Universidad de Panamá, donde el líder cubano iba a hablar ante un numeroso público de estudiantes. Meses después, fue amnistiado por la Presidenta de Panamá.


Posada Carriles en Texas
Posada arribó a Estados Unidos hace varias semanas y salió a la luz en una conferencia de prensa de capa y espada en Miami el 17 de mayo. El Departamento de Seguridad Interna (dhs) lo arrestó mientras trataba de escapar y lo acusó solamente de “entrada sin inspección”, como si sencillamente hubiera cruzado la frontera de manera ilegal para recoger alcachofas en Salinas. Funcionarios del DHS declararon oficialmente que EEUU no deportará a Posada a Cuba ni a “cualquier otro país que actúe a nombre de Cuba” (una referencia no muy velada a Venezuela).
Pero Venezuela está procurando activamente su extradición. Ha entregado al Departamento de Estado amplias evidencias que cumplen las normas para la extradición: causa probable de que es buscado en Venezuela por una ofensa extraditable bajo el tratado entre Estados Unidos y Venezuela, a saber, homicidio. No ha sido absuelto. Es un fugitivo de la justicia. Los cargos están pendientes y es buscado en Caracas por asesinato en primer grado de 73 personas inocentes.
Posada Carriles es el Osama Bin Laden de Latinoamérica. Si la administración Bush actúa seriamente acerca de la guerra contra el terror, tiene que extraditarlo para que comparezca ante el tribunal por el asesinato de 73 personas que viajaban en aquel avión. En nombre de las víctimas, en nombre de nuestra seguridad y en nombre de la justicia, su campaña de terror tiene que terminar.

viernes, 18 de mayo de 2007

Cronología actual de acciones en contra de la liberación de Posada


11 abril de 2005: En la primera de una serie de comparecencias especiales, el Presidente cubano denuncia la complicidad del Gobierno norteamericano con el terrorismo, al revelar que se pretende dar cobija en ese país a Posada Carriles. Noticias llegadas hace más de 10 días informaron que ese terrorista internacional está en Miami y se hacen gestiones para darle asilo.

17 de abril de 2005: Fidel advierte que a Posada Carriles podrían desaparecerlo en Estados Unidos. Que no lo maten ahora, que no lo envenenen, que no digan que murió de un infarto o derrame cerebral, estamos dispuestos a mandar médicos para cuidar su salud, para que cuente lo que sabe y vaya a juicio, señala el Presidente cubano.

1 de mayo de 2005: En su discurso ante más de un millón 300 mil cubanos reunidos en la Plaza de la Revolución José Martí para celebrar el Primero de Mayo, Fidel aporta otras pruebas acerca de la presencia de Posada Carriles en Miami y la evidente negativa de la Casa Blanca de actuar ante tal cúmulo de evidencias.

4 de mayo de 2005: El Canciller de Venezuela, Alí Rodríguez, pide a Estados Unidos cumplir con los acuerdos firmados y extraditar a Luis Posada Carriles para ser juzgado en Caracas.
10 de mayo: En nombre de la credibilidad, la consistencia y la justicia, el Gobierno de Estados Unidos debe arrestar y extraditar al terrorista Luis Posada Carriles, afirma en un editorial el periódico The New York Times.

11 de mayo: El Presidente cubano cita un informe del Buró Federal de Investigaciones (FBI), el cual reconoce que los terroristas Luis Posada Carriles y Orlando Bosch están vinculados al asesinato del ex Canciller chileno Orlando Letelier y su secretaria norteamericana en 1976.

12 de mayo: Fidel acusa al Gobierno de Estados Unidos de ocultar información, pues un día después de la voladura de un avión cubano frente a las costas de Barbados, el FBI y la CIA tenían conocimiento de los autores materiales e intelectuales del criminal suceso, según un documento leído por el mandatario durante su alocución especial de este día.

13 de mayo: Venezuela solicita oficialmente a Estados Unidos la extradición de Posada Carriles. En una conferencia de prensa en Washington, familiares de víctimas del terrorismo, académicos, abogados y líderes de organizaciones sociales y religiosas en EE.UU. exigen al Gobierno de ese país el arresto y extradición a Venezuela de Posada Carriles.


17 de mayo de 2005: Más de un millón 200 mil habaneros desfilan en Marcha del Pueblo Combatiente frente a la Oficina de Intereses de Estados Unidos para demandar que cese el terrorismo y se haga justicia. Esta es una marcha a favor de la vida y de la paz, de nuestro pueblo y del pueblo hermano de Estados Unidos, afirma Fidel poco antes de comenzar la histórica protesta. Posada Carriles es arrestado por agentes federales y llevado a un centro de detención en el sur de la Florida, donde recluyen a personas con problemas migratorios. El Departamento de Seguridad Interna dice que analizaría la situación del detenido y en 48 horas comunicaría el siguiente paso del proceso. Horas antes, el criminal había ofrecido una conferencia de prensa en la cual confirmó su petición de asilo político a la Administración Bush; pero poco después Eduardo Soto, abogado del terrorista, informó que este había decidido retirar la solicitud de asilo político y abandonar el territorio norteamericano.

18 de mayo: Fidel llama a las fuerzas progresistas del mundo a exigir que Estados Unidos entregue a Luis Posada Carriles a Venezuela para que allí sea juzgado.

Cronología de actos terroristas de Posada Carriles

Una resumida pero completa cronología de los principles actos terroristas realizados por el connotado terrorista Luis Posada Carriles; iniciando desde el mismo año del triunfo revolucionario en Cuba.

CRONOLOGÍA

1959: Se vincula a grupos contrarrevolucionarios que protagonizan diversos sabotajes en la Isla.

25 de febrero de 1961: Viaja con salvoconducto a Miami. Una semana después se vincula por órdenes de la CIA con las organizaciones contrarrevolucionarias que se preparan para la invasión a Playa Girón.

Marzo-abril de 1961: Sirve como instructor de los que en Guatemala se preparaban a integrar los equipos de infiltración y sabotajes a territorio cubano en Bahía de Cochinos. No participa en la invasión pues su barco no llega al lugar antes del fracaso de la fuerza mercenaria.

1961-1962: Se vincula en Estados Unidos a la organización terrorista Movimiento Nacionalista Cubano (MNC)

Mayo de 1965: El FBI informa que Posada Carriles estaba asociado con una conjura para derrocar al gobierno de Guatemala.

Junio de 1965: Un memorando desclasificado por la CIA lo ubica junto a Jorge Más Canosa en Veracruz, México, en el intento de volar un barco soviético.

Octubre de 1967: La CIA traslada a Posada Carriles a Venezuela, donde se incorpora a la Dirección de los Servicios de Inteligencia y Prevención (DISIP). Bajo el seudónimo de "Comisario Basilio" participa en la represión a grupos progresistas venezolanos y latinoamericanos.

1967-1976: Trabaja simultáneamente por orientaciones de la CIA para los servicios secretos de Venezuela, Guatemala, El Salvador, Chile y Argentina.

1971: Organiza un intento de asesinato al Comandante en Jefe Fidel Castro, aprovechando un viaje del líder cubano a Chile, Perú y Ecuador.

21 de enero de 1974: Está implicado en la colocación de artefactos explosivos en las embajadas cubanas en Argentina, Perú y México.

Julio de 1974: Envía cartas y libros con bombas a varios consulados de Cuba en América Latina.

7 de noviembre de 1974: Ubica bombas en el Instituto de Estudios Brasileños y en la Embajada de Bolivia en Ecuador.

1976: Funda, junto a Orlando Bosch, la organización terrorista anticubana Comité de Organizaciones Revolucionarias Unidas (CORU).

22 de abril de 1976: Involucrado en la detonación de una bomba contra la Embajada de Cuba en Portugal, hecho en el que pierden la vida dos funcionarios diplomáticos cubanos.

1ro. de julio de 1976: Pone una bomba en el Centro Cultural Costa Rica-Cuba, en Costa Rica.

9 de julio de 1976: Bomba en equipajes de vuelo de Cubana de Aviación en Jamaica.

10 de julio de 1976: Bomba en la Oficina de la línea aérea Cubana de Aviación, en Barbados.

11 de julio de 1976: Bomba en las oficinas de la Air Panamá, en Colombia.

6 de octubre de 1976: Es identificado como el principal planificador y autor intelectual, junto a Orlando Bosch, del atentado contra un avión cubano en pleno vuelo, frente a las costas de Barbados, donde pierden la vida 73 personas. Ambos criminales son detenidos en Caracas, y se someten a proceso judicial junto a Hernán Ricardo y Freddy Lugo, autores materiales del atentado.

18 de agosto de 1985: Durante un cambio de guardia, sale por la puerta de la prisión. Después de 15 días en Caracas, es trasladado a Aruba, en un barco camaronero. De allí viaja en un avión privado a Costa Rica y posteriormente a El Salvador. Todas las operaciones son financiadas por la Fundación Nacional Cubano-Americana (FNCA) e indirectamente por la estadounidense Agencia Central de Inteligencia (CIA).
Se incorpora en la base aérea de Ilopango al grupo que organiza a los suministros a la contrarrevolución nicaragüense.
Forma parte de la red de tráfico de armas controlada desde Washington por Oliver North, asesor para la seguridad interna del entonces Presidente de Estados Unidos, Ronald Reagan.

Octubre de 1986: Al desatarse el escándalo Irán-Contras se vincula a un grupo de instructores venezolanos que asesoran a la policía salvadoreña en técnicas contraguerrilleras y de interrogatorio.

1992: La FNCA crea un "ala militar", encargada de preparar y ejecutar acciones terroristas contra Cuba y sus principales líderes. En estas tareas participan activamente Guillermo e Ignacio Novo Sampoll y Luis Posada Carriles.

1993: El grupo terrorista de la FNCA adopta el nombre de Frente Nacional Cubano.

1994: En Cartagena de Indias, Colombia, Posada Carriles organiza un atentado fallido contra el Presidente cubano, en momentos en que este recorría el centro histórico de la ciudad junto al Premio Nobel de Literatura, Gabriel García Márquez.

1994-1997: Se dedica a reclutar mercenarios de países centroamericanos para ejecutar atentados terroristas contra diversos objetivos en Cuba, especialmente en el sector turístico.

12 y 13 de julio de 1998: En entrevista con el diario The New York Times, se adjudica la autoría de los ataques con bombas a instalaciones turísticas cubanas y afirma que son financiados por la FNCA.

5 de noviembre de 2000: Arriba a Panamá con pasaporte salvadoreño a nombre de Franco Rodríguez Mena, uno de sus alias para organizar un atentado con explosivos en el Paraninfo de la Universidad Nacional, donde hablaría Fidel Castro.

17 de noviembre de 2000: Fidel Castro denuncia una conjura para asesinarlo en una cumbre iberoamericana en Panamá. Funcionarios panameños encuentran explosivos y arrestan a Posada junto a Gaspar Jiménez Escobedo, Pedro Remón y Guillermo Novo Sampoll.

20 de abril de 2004: Los implicados en el caso son condenados a penas entre ocho y cuatro años de cárcel.

26 de agosto de 2004: La entonces Presidenta de Panamá, Mireya Moscoso, indulta a los cuatro terroristas. En la madrugada, tomando extremas precauciones, son extraídos de la prisión "El Renacer" y conducidos al aeropuerto de Albrook, donde toman una avioneta hasta el aeropuerto de Tocumen.
Allí montan en un jet particular que parte con rumbo a Honduras, donde se baja Posada Carriles, mientras los otros siguen vuelo hacia Miami, Estados Unidos.

Marzo de 2005: Posada entra a los Estados Unidos, y sus abogados dicen que busca asilo.

15 de mayo de 2005: En un artículo titulado La guerra que Posada Carriles no pudo ganarle a Fidel Castro, el Nuevo Herald asegura que ese terrorista está derrotado.